DEMOLIDO UN MURO DEL SIGLO XVII DE LA IGLESIA DE ESPINAMA
La iglesia vieja de Espinama lleva décadas de total abandono, sufriendo periódicamente atentados que comprometen su continuidad. El último hasta ahora había sido la demolición de su sacristía y de un contrafuerte durante las obras de la carretera a Fuente Dé, allá por 1990 aproximadamente. Entonces se salvó un solo muro de la sacristía, el más alejado de la carretera. Ahora, ese muro ya es historia.
En efecto. En fechas recientes se ha procedido a rellenar el hueco de la sacristía y, de paso, se ha derribado el muro, muro que tenía el interés añadido de conservar en él una piedra con la inscripción "1686" alusiva al año en que se construyó. El espacio ocupado por la sacristía sirve ahora ya como aparcamiento para dos vehículos.
Es cierto que, tal y como estaba, como se aprecia en la fotografía, la antigua sacristía suponía un peligro, por el riesgo de que cayera alguien a su interior, protegida solo por unas vallas móviles. También es cierto que así llevaba más de veinte años sin que nada hubiera ocurrido. Pero, aun aceptando que fuera necesario realizar el relleno, ¿había que derribar el muro? Máxime cuando ahora existe el riesgo de caerse para la parte de abajo lo que obligará a instalar una valla o levantar otro murete.
Desde esta página se ha defendido siempre la
rehabilitación de esa iglesia. Se ha dado a conocer su
historia, incluyendo el contrato de construcción de la sacristía de 1685 de cuya realización era el último resto el muro ahora derribado. Sin embargo, no sólo no se rehabilita sino que se siguen haciendo desaparecer partes de ella. De nada ha servido esta labor de divulgación.
Estas son las fotos del antes y el después:
Las tres fotos superiores muestran cómo estaba hasta ahora y las inferiores cómo ha quedado. En la foto del centro de arriba, aunque no es de mucha calidad, se ve la piedra con la inscripción "1686", de la que habría que averiguar su paradero.
Última actualización: 16 de agosto de 2016