"LUZ EN LAS MONTAÑAS"


Éste es el título del espectáculo presentado en Fuente Dé el 21 de abril de 2007 por el célebre grupo catalán "La Fura dels Baus". El espectáculo se incluía en la gran trilogía final del Año Jubilar Lebaniego 2006/07 programada por la Consejería de Cultura y Turismo del Gobierno de Cantabria y su consejero Francisco Javier López Marcano, que se completaba con espectáculos pirotécnicos en Torrelavega (día 20) y en Santander (día 22).

Antes del espectáculo
El consejero López Marcano anuncia con meses de antelación la celebración del acontecimiento que será, en su opinión, "memorable". La Fura dels Baus prepara un espectáculo único, especial para Fuente Dé, durante más de un año.

Acercándose ya la fecha, el día 17 de abril, concreta más detalles que se recogen en un comunicado oficial, en el que se dice que el 21 de abril, en la campa del Circo de Fuente Dé (Camaleño), a partir de las 22:00 horas, tendrá lugar –a lo largo de cincuenta minutos- el espectáculo IDE ‘Luz en las Montañas’, creado por ‘La Fura Dels Baus’.

Se trata de una performance teatral, basada en la mitología cántabra, con proyecciones audiovisuales del Beato e iconografía del Año Santo Jubilar Lebaniego.

La organización de ‘Cantabria 2007. Liébana Tierra de Júbilo’ regulará el acceso en autobús desde las 18:00 horas. Los autobuses tendrán parada en Potes, Cosgaya (donde se habilitará una amplia campa para aparcamiento) y en Espinama. Serán gratuitos.


Mientras tanto, el 16 de abril, según parece, llegan a Fuente Dé los camiones con el material del espectáculo, procediéndose a su descarga. Ese mismo día, por la tarde, se negocia con el Parque Nacional de los Picos de Europa la autorización. El Parque la concede, obligando a suprimir del espectáculo el componente pirotécnico con el que concluía, motivo por el cual parte de lo descargado vuelve al camión. Además, en lugar de realizarse en la campa como estaba inicialmente previsto debe ser en el aparcamiento donde se realice la instalación. El Gobierno de Cantabria, finalmente, debe ofrecer una fianza de 300.000 euros para cubrir los daños que se puedan originar.

El día del espectáculo
El 21 de abril amanece un buen día, con agradable temperatura. La lluvia caerá, sin embargo, hacia las tres de la tarde, de forma pasajera, quedando una noche muy agradable.

Conforme estaba previsto, a las seis de la tarde, la Guardia Civil instala un control en la carretera a la altura del desvío para acceder a Pido, en la Tierra de La Cruz. Quienes no habían subido antes, son obligados a volver, aparcando por los márgenes de la carretera y, muchos, por los del camino que conduce hacia Melendro, como se ve en las fotos:
Desde las seis, la Guardia Civil impidió el paso de vehículos particulares
El camino de acceso a Pido en la Tierra de La Cruz sirvió de aparcamiento a muchos coches. Al fondo, se ve el margen de la carretera en El Jerrón igualmente ocupado por los coches. Pinche para verlo más grande


Al mismo tiempo, comienzan a salir autobuses desde Potes y desde Cosgaya, donde se ha habilitado un gran aparcamiento. A las seis y media han subido ya seis autobuses. Parece que la cosa está bien organizada. Sin embargo, uno empieza a dudar cuando ve que los autobuses que han subido tardan mucho en bajar para volver a hacer de nuevo el recorrido. Al parecer, no se ha reservado un espacio en Fuente Dé para que los autobuses den vuelta y, con coches por todas partes, se las ven y se las desean para hacerlo. Además, en contra de lo previsto, según denuncia Jorge en el Libro de Visitas no paraban en Espinama, impidiendo el acercamiento a los vecinos del pueblo en cuyos términos se celebraba el espectáculo.

A las ocho de la tarde dejan de subir los autobuses, cuando todavía hay en Potes cientos de personas esperando, sin que nadie les haya advertido de que ya no suben más autobuses. Así lo cuenta en El Diario Montañés un afectado. Posteriormente, originan incidentes, cortando el tráfico.

El espectáculo

En una noche de temperatura agradable, el espectáculo comienza con puntualidad, a las diez, y lo hace con una gran noria, con ocho personas en su interior, izada por una grúa y trasladada así de un extremo al otro del aparcamiento de Fuente Dé. Esta noria representa el ineroxable paso del tiempo, con sus continuas vueltas, ante el que nada se puede hacer. Los grandes focos proyectan su sombra sobre las paredes del circo de Fuente Dé haciendo más vistosa la representación.
La noria suspendida en el aire. Pinche para verlo más grande

A continuación, en paneles colocados en la campa, en la zona próxima al aparcamiento, se muestran diversas imágenes de los "Comentarios al Apocalipsis" del Beato de Liébana para seguir con una procesión, acompañada por la música de una banda típica de Semana Santa, que acaba junto a un gran ojáncano, de nueve metros de alto, siguiente protagonista del espectáculo.
Una de las imágenes de los beatos proyectada
Los actores en plena procesión hacia el ojáncano. Pinche para verlo más grande


El ojáncano. Pinche para verlo más grande

El ojáncano se enfrenta a quienes procesionaban hasta que, de la cabina del teleférico, detenida tras una lenta subida unos cuantos metros por encima del ojáncano, se descuelga una anjana de la que queda prendado, lo que le deja indefenso ante los de a pie, uno de los cuales trepa por él y consigue darle muerte.

Un momento del descenso de la anjana desde la cabina. Pinche para verlo más grande

Momento de la muerte del ojácano, golpeado en su ojo. Pinche para verlo más grande


El espectáculo concluye con el traslado del cadáver del ojáncano, sobre el que va la anjana, escoltado por el pueblo, hasta ser incinerado.
La anjana celebra la muerte del ojáncano. Pinche para verlo más grande

Cuarenta y cinco minutos fue la duración del espectáculo que no colmó, ni con mucho, las grandes expectativas levantadas, sobre todo teniendo en cuenta las muchas horas de espera que llevaba la mayor parte del público asistente. Según algunos rumores, que no he podido confirmar, incluso hubo quien se dirigió con insultos al consejero López Marcano que habría sido evacuado por la Guardia Civil en uno de sus vehículos. Para rematarlo, el caos reinó en el desalojo de Fuente Dé por los miles de espectadores y de vehículos, a lo que se añadió el corte de carretera realizado en Potes como protesta por quienes no pudieron subir a Fuente Dé, hasta el punto de que pasada la una de la madrugada seguía habiendo gente en Fuente Dé esperando poder bajar.

Crítica

Ahí quedan algunas preguntas para reflexionar sobre si se hicieron bien o no las cosas:
  • ¿Se advirtió por la Consejería a La Fura que Fuente Dé forma parte del Parque Nacional de Picos de Europa y que, por tanto, tendrían ciertas limitaciones en su espectáculo?
  • ¿Por qué no se contactó con el Parque Nacional hasta última hora? Si lo hubieran hecho hace unos cuantos meses, La Fura hubiera tenido tiempo para completar el espectáculo con algún otro tema en sustitución de lo eliminado.
  • ¿Por qué no se reservó un espacio para que los autobuses dieran la vuelta? ¿Por qué no se les dejó en primera línea de salida y orientados hacia Potes para, a la conclusión del espectáculo comenzar inmediatamente a evacuar gente?
  • ¿Por qué se permitió que parte del público se ubicara en la campa para, veinte minutos antes del inicio del espectáculo, desalojarles de allí hacia el aparcamiento?
  • ¿Se hizo una estimación previa de los vehículos y la gente que podía acoger Fuente Dé?
  • ¿Por qué si se veía que la afluencia de vehículos sobrepasaba lo admisible no se cerró la carretera antes, poniendo en funcionamiento primero los autobuses?
  • ¿Por qué no se informó a quienes esperaban, tanto en Potes para subir como luego en Fuente Dé para bajar, de cuál era la situación?


    © Gabino Santos
    Nota: Las imágenes del espectáculo están tomadas de una grabación en video por lo que su calidad puede dejar algo que desear.